miércoles, 25 de agosto de 2010

CONSEJERÍA Y LA CRISIS EN LA RELACIÓN CONYUGAL








CRISIS EN LA RELACIÓN CONYUGAL
Última actualización: 20 de Febrero, 2022

Llegan los momentos de crisis, y sucede  independientemente de nuestra relación con Dios; esto, por el simple hecho de que somos humanos y por lo tanto seres imperfectos, limitados. Con virtudes, pero falibles; unos, aspirando trascender, otros, carentes de tal aspiración. 

Momentos de oportunidad

Cuando surge un conflicto, se nos olvida que son momentos de oportunidad para el crecimiento personal. Esto es, ampliar nuestra perspectiva del problema y aprovechar la ocasión para el análisis introspectivo, que haga inclusivo el desafío ante el planteamiento de la solución al conflicto. 

Crisis en las etapas de desarrollo

Los momentos de crisis se presentan en las diversas etapas de desarrollo del ser humano. Desde la infancia y hasta la adultez pasamos por esas diferentes y necesarias crisis en nuestra evolución como personas en crecimiento. Si nos diéramos cuenta de esto, estaríamos mejor preparados para enfrentar los momentos de crisis que tenemos que enfrentar. 

Crisis y el desarrollo de la pareja

Específicamente, la crisis en la relación conyugal, es una crisis que afecta no solo a la pareja pero a la familia en general. La crisis en la relación conyugal, desafortunadamente se ve casi siempre desde una perspectiva negativa, como un conflicto difícil de solucionar, cuando en realidad, debiera de verse como una ocasión de desarrollo integral en la pareja

Crisis y el crecimiento individual

Esta crisis es también una oportunidad de crecimiento como pareja, pero también como individuos, donde cada uno esté dispuesto a tomar el desafío de ser mejor. Si es necesario, comprometiéndose para mejorar ciertos aspectos de su conducta, su forma de pensar, o la manera en cómo se está relacionando en esa etapa de su vida. 

Beneficios de la crisis

La crisis en la relación conyugal puede ser de beneficio al presentar aquellas soluciones positivas de crecimiento y desarrollo para la pareja en los diversos ámbitos de atención: psicológico, emocional y espiritual. Claro, no podemos dejar de lado el aspecto espiritual, pues, con Dios, la resolución de todo conflicto es mejor. No necesariamente más fácil, pues se requiere confrontar las diversas situaciones que se presentan en una crisis, y eso no es fácil.

La confrontación 

En el caso de conflicto en la relación conyugal es de mucha utilidad la confrontación para avanzar en la solución del problema. Esto quiere decir que se va a analizar la cuestión cara a cara. Y el objetivo es fijar límites que ayuden a avanzar en la solución de la crisis.

Error en matrimonios 

El permitir la intervención de Dios en la solución de la crisis, nos ayudará a definir los pasos que hemos de dar para lograr la solución del conflicto en cuestión. Muchos matrimonios, la mayoría, no saben que pueden lograr beneficios en el momento de la crisis. Por lo tanto, cometen el error de no pedir orientación y prefieren dejar que pase el conflicto, pensando que este se soluciona solo. Ignorancia o descuido, una de dos, llevan los matrimonios al fracaso

La  consejería matrimonial

La ayuda del consejero es importante pues es quien va a guiar en esos momentos de crisis, orando, escuchando, orientando, definiendo la responsabilidad del afectado o los afectados, y así avanzar en la solución del problema. La crisis atendida, así como el compromiso y responsabilidad del o de los involucrados, nos da la pauta para el inicio de la solución en el momento del conflicto.

Que no quede por ignorancia o descuido. 
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       Última actualización: 20 de Febrero, 2022
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jueves, 5 de agosto de 2010

CONSEJERÍA PARA EL MATRIMONIO

Especie en extinción...

En la actualidad es muy difícil encontrar matrimonios que perduren, y que perduren en armonía. Por lo general el sentir que persiste, consciente o inconscientemente, es el egoísmo mal fundado. Ese deseo innato de obtener nuestro personal beneficio en todos los ámbitos de nuestra vida.

Es tan difícil seguir el consejo: “Someteos unos a otros en el temor de Dios” (Ef.5.21). Tal consejo se puede considerar la premisa en cuanto a los deberes de los esposos; y si un matrimonio ha de empezar bien, ha de ser bajo esta prerrogativa.

En cierta manera se ha descuidado la consejería prenupcial, la consejería prematrimonial a los jovenes casaderos. Algunos líderes no han visto la importancia de dicha orientación antes del matrimonio. Pero los jóvenes, antes y durante el noviazgo, tienen tantas dudas qué aclarar y tenemos que darnos cuenta de ello.

 Debemos ser observadores de su conducta, sus inquietudes, -muchas veces traumas- y lograr una buena comunicación con ellos, a traves del compañerismo, por medio de conferencias, o talleres sobre sexualidad, interactuando con ellos por medio de dinámicas, y el abordaje de temas especiales para la juventud, como la autoestima, etc., porque muchos no se atreven a externar sus temores.

-Hoy, el entrevistador de la aprobación de visas fronterizas, le hizo una pregunta al matrimonio solicitante de dicho documento: «¿Cuánto tiempo tienen de casados?», la respuesta fue: «Treinta años», y esa fue una de las tres preguntas que les hizo antes de darles la aprobación de su Visa. Al comentar con mi esposa acerca de ello, su respuesta inmediata fue que tal respuesta es señal de estabilidad matrimonial, en lo cual estuve totalmente de acuerdo.

Actualmente, el matrimonio, como institución y fundamento de nuestra sociedad, no tiene ni el respeto ni la dignidad que se merece. Consejeros, pastores, guías, líderes de jóvenes, no debemos pasar por alto la tal asesoría prematrimonial tan necesaria, aún en el siglo XXI.
En lo personal, al cuestionar sobre el tema me he dado cuenta de algo, y lo digo con certeza: los jóvenes que estan entrando al matrimonio y muchos de los que ya están dentro, no saben que existe un objetivo definido en el matrimonio... y este es la realización del cónyuge como persona, impulsándole hasta lograr sus propias metas. 

Con ese objetivo en mente, claro que no existiría el tal egoísmo mal fundado... no creen??... ni machismos, ni micromachismos... ni violencia en el noviazgo, ni en la familia...


Libro recomendado: Preparándose para su matrimonio. William McRae. Zondervan Publishing House.